Hace unos meses me encontré en una conversación en la cual ni esperaba platicar temas de fe. Pero en medio de la conversación, ahí estaba una pregunta, frente a mí por unos segundos (que ahora parece como minutos), esperando una respuesta como si fuera una de esas preguntas que les hacían a las candidatas de concursos de belleza acerca de la paz mundial. Donde hay una pausa y todo el mundo espera que haya una respuesta perfecta sino ahí termina toda ilusión de que sea la ganadora.
In este último año, he tenido diferentes conversaciones con Católicos y personas que no son Católicos, donde tengo la oportunidad perfecta de compartir mi fe. En varias ocasiones he platicado con orgullo las razones maravillosas por las cuales soy Católica. Pero esta vez, parecía varias preguntas en solo una. La misma persona también me acababa de preguntar que si yo era Católica “Menú”. Es decir, que si creo y sigo la Iglesia solo en lo que yo selecciono y a mi gusto o que si verdaderamente vivo la fe Católica. Le respondí lo mejor que pude y con honestidad. Me da mucha tristeza reconocer que no he sido la mejor Católica en diferentes ocasiones de mi vida, pero realmente estoy intentando crecer, aprender, y seguir a Jesucristo.
Ahí estábamos en nuestra plática sorpresa acerca las diferentes denominaciones, religiones, y creencias, cuando apareció esta pregunta. “¿Si tu realmente eres Católica, tú crees que los demás nos vamos ir al infierno, no? Pausa . . . “Pues no” . . . silencio . . . lo pensé por un segundo y luego entendí a que se refería. No estaba desafiando mis creencias y de ninguna manera estaba actuando sin respeto, sino que solo quería dar su punto de vista acerca de las diferentes denominaciones y religiones.
La Iglesia si da certeza de que ciertas personas (Los Santos) han llegado a cielo por la evidencia que tenemos de sus vidas, pero nunca condena o proclama que ciertas personas vayan infierno. Yo personalmente, no tengo ni la menor autoridad de decir si alguien va ir infierno. Solo Dios puede juzgar, pero sí sé que yo voy a ser juzgada algún día. Hay cosas que creemos como Católicos, y si yo no las hago parte de mi vida, mi fe no es completa. Por ejemplo, tenemos los sacramentos y se la importancia que tienen los sacramentos en nuestro camino al cielo. No quiere decir que los que no son Católicos no irán al cielo, pero si quiere decir que yo como Católica debo seguir todo lo que la Iglesia representa – todo. Las reglas y tradiciones de la Iglesia no son así nomás porque sí. Tienen un significado profundo y fueron instituidas por nuestro Señor Jesucristo.
Aunque no estaba preparada ese día y no di una respuesta profunda, la pregunta me sirvió de mucho. Tuve que hacer pausa y recordar lo que yo creo y porque lo creo. Yo creo en la Iglesia que estableció Jesucristo y la cual dejo en las manos de San Pedro para que el la construyera. Yo deseo y necesito seguir esa Iglesia.
A lo largo de nuestras vidas como Católicos podemos ir a misa cada domingo como obligación simplemente o podemos llegar apreciar todo lo que es la Iglesia Católica. Podemos elegir entender más y aprender lo hermoso que es la Iglesia. Cada cosa tiene un significado, hasta el último detalle. La Iglesia (que se compone desde el Papa, la Virgen María, los santos, y hasta cada miembro de nuestra parroquia) está ahí para nuestro bien, para ensenarnos lo necesitamos saber para vivir una vida mejor y estar preparados para partir de esta vida y entrar a la siguiente.
Nuestra fe Católica enriquece nuestras vidas y nos ayuda de muchas maneras. Hay muchos recursos disponibles en nuestras parroquias y diócesis. Este sitio de Austin Catholic New Media tiene el propósito de ser un recurso de fe también. Si no han tenido la oportunidad de leer o escuchar las otras contribuciones de este sitio, vale mucho la pena hacerlo. Hay explicaciones, testimonios, y además mucha diversión. Nuestra fe no tiene nada de aburrido y aquí podemos aprender todos juntos lo que significa ser Católico.